Seguro (...estás jodido)
El viernes por la mañana, como parte del programa prevenIMSS, enfermeras del seguro fueron a mi trabajo.
Enfermera: "¿Tiene su credencial a la mano?"
Yo (anticipando con molestia la respuesta): "¿Es absolutamente necesaria?"
Enfermera: "No, si se sabe su número del seguro con eso es suficiente"
Yo: (Puta madre, no me sé ni mi número de teléfono...) "Vaya, déjeme ir entonces por mi credencial... (...que está en mi oficina del otro lado de la nada pequeña planta)".
Sale Manuel corriendo en chinga porque de por sí no le alcanza el día como para andar perdiéndolo en estas visitas turísticas.
Yo: "Huff, puff, aquí tiene."
Enfermera: "Muy bien. Déjeme tomarle su presión arterial. ¿Se puso nervioso? Su presión diastólica está un poco alta."
Yo: (Tal vez el hecho de que acabo de hacer como un kilómetro en dos minutos tenga algo que ver...) "No, no me pongo nervioso, probablemente haya sido por la caminada... (...que me hubiera evitado si hubieran avisado que necesitaría mi número del seguro a la mano.)"
Enfermero: "Pues trae 110 - 90, un poquito alta pero dentro de lo normal"
Yo: (El 'experto' es usted, aunque no creo que sea normal tener 20 mmHg de diferencia entre sistólica y diastólica... pero en fin) "Gracias."
Enfermero: "A ver vamos a pesarlo... Listo, usted pesa X kilos y su cintura mide Y cm."
Yo: (Diantres, tendré que reducir las visitas a la taquería a sólo 3 veces por semana)
Enfermera: "A ver, vamos a tomarle el azúcar. Permítame un dedo"
Yo: (Of course I'll give you the finger! I was quite OK without you telling me how much I weigh) "Por supuesto."
Enfermera: "Salió muy bien, trae 90 de azúcar"
Yo: (¿Qué esperaba si van a ser 10 de la mañana, acabo de correr 2 kilómetros y no he desayunado? ¿Que trajera 120?) "Gracias."
Enfermera: "¿Se ha puesto vacunas desde que tenía 20 años?"
Yo: "Mire señorita, no me acuerdo ni de la última vez que me puse una vacuna, ni de cuando tenía 20 años, así que póngame todo lo que me tenga que poner de una vez."
Enfermera: "Muy bien, le vamos a poner para sarampión, rubeola y tétanos"
Yo (con un inquietante deja vú): "¡La del tétanos en el brazo izquierdo!"
Enfermera: "No, no, en los brazos duele más, se la pondré en el glúteo para que no le duela tanto."
Yo (Refunfuñando): "Está bien..."
Este sábado desperté de la peor manera que un hombre se puede imaginar:
Sin recordar cómo y a qué hora llegué a la casa, quién me trajo y con un terrible e insoportable dolor en el trasero.
¡Maldita vacuna para el tétanos!
Enfermera: "¿Tiene su credencial a la mano?"
Yo (anticipando con molestia la respuesta): "¿Es absolutamente necesaria?"
Enfermera: "No, si se sabe su número del seguro con eso es suficiente"
Yo: (Puta madre, no me sé ni mi número de teléfono...) "Vaya, déjeme ir entonces por mi credencial... (...que está en mi oficina del otro lado de la nada pequeña planta)".
Sale Manuel corriendo en chinga porque de por sí no le alcanza el día como para andar perdiéndolo en estas visitas turísticas.
Yo: "Huff, puff, aquí tiene."
Enfermera: "Muy bien. Déjeme tomarle su presión arterial. ¿Se puso nervioso? Su presión diastólica está un poco alta."
Yo: (Tal vez el hecho de que acabo de hacer como un kilómetro en dos minutos tenga algo que ver...) "No, no me pongo nervioso, probablemente haya sido por la caminada... (...que me hubiera evitado si hubieran avisado que necesitaría mi número del seguro a la mano.)"
Enfermero: "Pues trae 110 - 90, un poquito alta pero dentro de lo normal"
Yo: (El 'experto' es usted, aunque no creo que sea normal tener 20 mmHg de diferencia entre sistólica y diastólica... pero en fin) "Gracias."
Enfermero: "A ver vamos a pesarlo... Listo, usted pesa X kilos y su cintura mide Y cm."
Yo: (Diantres, tendré que reducir las visitas a la taquería a sólo 3 veces por semana)
Enfermera: "A ver, vamos a tomarle el azúcar. Permítame un dedo"
Yo: (Of course I'll give you the finger! I was quite OK without you telling me how much I weigh) "Por supuesto."
Enfermera: "Salió muy bien, trae 90 de azúcar"
Yo: (¿Qué esperaba si van a ser 10 de la mañana, acabo de correr 2 kilómetros y no he desayunado? ¿Que trajera 120?) "Gracias."
Enfermera: "¿Se ha puesto vacunas desde que tenía 20 años?"
Yo: "Mire señorita, no me acuerdo ni de la última vez que me puse una vacuna, ni de cuando tenía 20 años, así que póngame todo lo que me tenga que poner de una vez."
Enfermera: "Muy bien, le vamos a poner para sarampión, rubeola y tétanos"
Yo (con un inquietante deja vú): "¡La del tétanos en el brazo izquierdo!"
Enfermera: "No, no, en los brazos duele más, se la pondré en el glúteo para que no le duela tanto."
Yo (Refunfuñando): "Está bien..."
Este sábado desperté de la peor manera que un hombre se puede imaginar:
Sin recordar cómo y a qué hora llegué a la casa, quién me trajo y con un terrible e insoportable dolor en el trasero.
¡Maldita vacuna para el tétanos!